La confianza seguirá siendo la clave de cualquier campaña de éxito de e-mail marketing

Los ataques de phishing son uno de los principales problemas que minan la confianza en las marcas para llevar adelante sus campañas de email marketing, causando cada vez más daño. Aunque muchas marcas utilizan dominios de Internet que usan la autentificación de protocolos SPF (Sender Policy Framework) y DKIM (DomainKeys Identify Email), los estafadores todavía encuentran formas para engañar a los usuarios.

Por este motivo Microsoft Corporation introdujo BIMI (Branded Indicators for Message Identification). Se trata de un estándar para aumentar la confianza de los correos electrónicos mostrando iconos de las marcas en el asunto, cuyo objetivo es incrementar la seguridad. El estándar de BIMI se puede ver y comentar públicamente en GitHub, y en los próximos meses tendrá lugar una discusión pública.

El futuro del e-mail

Las apps inteligentes ofrecen una oportunidad para el e-mail marketing del futuro. Éstas leen los e-mails por los usuarios, y muestran en forma de mapa, la información más importante, incluyendo datos extra de Internet –  por ejemplo el pronóstico meteorológico para un futuro viaje.

Los ISP (Internet Service Provider), ESP (E-mail Service Provider) y Trust Center como la CSA, supervisan el flujo de información entre marcas y consumidores.

Por eso mismo el CSA está ganando popularidad entre los ISP y ESP ya que aumenta la confianza de los clientes al ser un órgano neutral. También se espera que en los próximos años los asistentes inteligentes como Alexa o Siri, aprendan más y más habilidades para gestionar los e-mails.

Buenas prácticas para una buena reputación

La tendencia hacia e-mails adaptados para smartphones también tiene un impacto en la reputación de los remitentes, especialmente si el destinatario del e-mail, con tan solo un movimiento de dedo puede reportar el e-mail como spam. Los expertos en marketing digital recomiendan por ejemplo, permitir a los destinatarios darse de baja con tan solo un click, para proteger la reputación de la marca. Detectar la identidad del remitente utilizando SPF, DKIM etc es tan importante como la gestión profesional de las respuestas y rebotes de los e-mails.


La Certified Senders Alliance (CSA) es un proyecto lanzado en el año 2004 por parte de Eco –  Asociación Alemana de la Industria de Internet, y la DDV, Asociación Alemana del Marketing y Diálogo. La cooperación de ambas asociaciones garantiza tanto el apoyo de la economía de Internet como el apoyo de empresas de venta directa.

El objetivo de la CSA es mejorar la calidad de los e-mails jugando un papel neutral. Como consecuencia, la CSA tiene la tarea de elaborar normas técnicas y legales que garanticen la calidad de los envíos y estén actualizadas según los requisitos del mercado, además de establecer estos estándares dentro del marco de la certificación.